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Cultura, Fe y Perspectiva

Autor

Scott Shiffer

Mandato Cultural está diseñado para ayudar a la gente a pensar en la cultura de manera crítica, pero en amor y más apegada al pensamiento cristiano. Nuestra meta es ayudar a la gente de todo el mundo a desarrollar una visión que abarque la creación, la caída y la redención, tal como se revela en las Escrituras, a fin de permitir que esos temas moldeen a la forma en que ven el mundo. Dios está interesado en cada aspecto de la vida humana y como tal, la manera en que nos relacionamos con cada asunto en que creemos es importante para el Señor. Debemos ser capaces de enfocar la familia, la amistad, la educación, el trabajo, los pasatiempos, el entretenimiento, la política, la comunidad, la salud y otros temas desde una perspectiva bíblica. Los cristianos deben vivir en armonía con el mundo. El mundo es nuestro hogar.

En el mundo, pero no del mundo
Dios nos creó para ser representantes de Su reino en esta tierra. Como tal, debemos compartir toda la bondad, el amor, la misericordia y la esperanza que son parte de vivir dentro de la voluntad de Dios en el mundo que nos rodea. No debemos ser del mundo. Esto no significa que debamos retirarnos de la cultura o segregarnos de la sociedad. Significa que nuestras vidas no deben ser caracterizadas por las prácticas pecaminosas que obstaculizan nuestra relación con Dios. Debemos vivir de tal manera que la sociedad vea una calidad de vida diferente en nosotros. Las personas que no son cristianas deben ver a Cristo en nosotros. Cristo amó a las personas en donde ellas estaban, pero siempre los llamó a algo mejor. Como cristianos debemos hacer lo mismo, amar a las personas donde están y hacer siempre lo que podamos para mejorar el mundo.

En el mundo occidental, la cultura es un término ampliamente utilizado. Países como los Estados Unidos son multiculturales o cosmopolitas. Y no solo me refiero a que haya diferentes grupos étnicos o razas, sino a múltiples expresiones culturales. Tenemos cultura de los medios de comunicación masiva, cultura del entretenimiento, cultura política, cultura de iglesia, cultura académica, etc. Cada persona vive en numerosas culturas. Como cristianos debemos permitir que nuestra fe impregne cada aspecto de la cultura en la que vivimos. Debemos permitir que nuestra fe cristiana nos ayude a saber en qué tipo de entretenimiento participar y qué tipo evitar. También debemos permitir que nuestra fe nos guíe en cómo votamos, cómo cuidamos de los pobres, cómo cuidamos de las especies animales en peligro de extinción, cómo abordamos el racismo, etc.

La cultura ayuda a dar forma a las ideas y creencias de una sociedad, y a su vez, la sociedad ayuda a dar forma a la cultura. La iglesia ha tenido un papel en la formación de la sociedad, pero la sociedad también ha jugado un papel en la formación de la iglesia. Todos somos un producto del mundo que nos rodea. Como cristianos deseamos aferrarnos a lo que es bueno. Deseamos vivir una vida activamente comprometida en la sociedad, pero en obediencia a la voluntad moral de Dios.
Este ministerio está diseñado para ayudar a las personas a evaluar, juzgar y decidir por sí mismas en qué creer y cómo vivir su fe en interacción con la cultura.

Las culturas y Dios
Hay culturas de clase alta, media y baja. Hay culturas étnicas. Hay culturas de género. Hay culturas geográficas. Hay culturas religiosas. Hay culturas educativas. Cada persona vive en múltiples y a veces muy contradictorias culturas. Cada persona ve el mundo a través del lente de su grupo étnico, de su género, de su preferencia religiosa, su nivel de ingresos, su nivel académico, sus experiencias pasadas, su tradición familiar, etc. Como diría Emmanuel Kant: "No puedes ver el mundo tal como es, sino como tú percibes que lo es." Con tantas influencias a nuestro alrededor, es imperativo que descubramos por nosotros mismos qué culturas nos rodean y cómo vamos a vivir en ese entorno. Como parte de ese proceso, definir lo que creemos acerca de Dios es muy importante. Debemos permitir que nuestras creencias nos ayuden a comprender cómo actuar y pensar en nuestras circunstancias actuales y particulares.

¿Qué creo acerca de Dios? es quizás una de las preguntas más importantes que una persona puede hacerse a sí misma, porque la respuesta a esa pregunta afectará la forma en que esa persona piense acerca de todo lo demás en el entorno de su cultura.

Sobre el Autor

Experto en el campo de la tecnología en la educación superior durante 20 años. Ha trabajado en ciberseguridad y protección en Internet, con acreditaciones en la GLBA y la FERPA. Es administrador de sistemas en productos LMS y SIS, Microsoft Teams, Zoom y otros programas informáticos diversos. Además de trabajar en informática, he estado enseñando a nivel universitario durante más de una década en los campos de la Teología, la Filosofía y la Historia. Vive en Midlothian, TX con su esposa y sus 5 hijas.

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